«La liberación de 1.600 guerrilleros genera un problema de seguridad nacional»: Araújo
Bogotá, 30 de mayo del 2017. En plenaria de senado, el congresista Fernando Araújo, aseguró que el acuerdo firmado entre el Gobierno y las Farc está lleno de engaños e impunidad y cada vez genera más desconfianza en los colombianos. Al mismo tiempo advirtió que la liberación de 1.600 guerrilleros genera un problema de seguridad nacional.
A continuación el texto de la constancia:
“El acuerdo de Santos con las Farc, negociado a espaldas de los colombianos, incluidas las victimas, que cursa su implementación, a pesar de que fue rechazado por la ciudadanía, es un proceso lleno de engaños e incumplimientos y cargado de impunidad.
Hoy se cumple la fecha establecida como límite para que los miembros de las FARC finalizaran la entrega de armas a la ONU. Sin embargo, estás no serán entregadas. Como respuesta, Santos les otorga 20 días más de plazo en lugar de exigir cumplimiento.
Según el gobierno, inteligencia colombiana encontró más de 900 caletas con armamento y dinero de los terroristas, que no estaban relacionadas. No se sabe con certeza cuántas armas hay en total ni qué ha pasado con estas caletas. El Gobierno, en lugar de condenar el hecho como un delito continuado, le garantiza la permanencia de las zonas veredales como un mayor beneficio a las Farc.
Las Farc han sido responsables de delitos atroces, como el reclutamiento forzado de menores, el abuso sexual y el aborto inducido. Los colombianos seguimos esperando la liberación de los menores secuestrados.
Voceros de las victimas como Herbin Hoyos y Sofía Gaviria han señalado que hay más de 700 desaparecidos sobre cuyo paradero las Farc tienen información. Sus familiares, ni siquiera serán reparados ni han tenido derecho a la verdad.
Ayer liberaron a alias Richar, quien según algunas autoridades tiene una fortuna superior a 400 millones de dólares. Ni un solo peso de esa fortuna se ha utilizado para reparar a las victimas.
Otros 1.600 responsables de crímenes de lesa humanidad están siendo liberados, poniendo en riesgo la seguridad nacional, sin ni siquiera asumir una postura de genuino arrepentimiento frente a las víctimas de sus crímenes.
Las Farcrim en cooperación con bandas criminales y otros grupos guerrilleros controlan más de 180.000 hectáreas de coca. La única respuesta de Santos es la erradicación voluntaria. El futuro de Colombia en manos de la voluntad de las Farc.
Más de 65.000 millones derrocha el gobierno en la construcción de las zonas veredales. Convirtiendo a las mismas en catedrales del crimen donde los guerrilleros festejan y bailan con delegados de los garantes.
La inseguridad de las ciudades es terrible, no se sabe si hay milicianos involucrados en crímenes de lesa humanidad o crímenes comunes.
Este acuerdo ha sido una burla para los colombianos y las victimas de las Farc. Nuestra desconfianza sigue aumentando”